Texto: Malaquías 3:13-18
Diferencia entre el justo y el malo. 13 Vuestras palabras contra mí han sido violentas, dice Jehová. Y dijisteis: ¿Qué hemos hablado contra ti? 14 Habéis dicho: Por demás es servir a Dios. ¿Qué aprovecha que guardemos su ley, y que andemos afligidos en presencia de Jehová de los ejércitos? 15 Decimos, pues, ahora: Bienaventurados son los soberbios, y los que hacen impiedad no sólo son prosperados, sino que tentaron a Dios y escaparon. 16 Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero; y Jehová escuchó y oyó, y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen a Jehová, y para los que piensan en su nombre. 17 Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos, en el día en que yo actúe; y los perdonaré, como el hombre que perdona a su hijo que le sirve. 18 Entonces os volveréis, y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve.
Introducción:
Atender el servicio en el templo de Jehová era un alto honor para todos los israelitas, siempre veían con respeto y admiración a todos los que atendían las cosas sagradas, se respetaba mucho la ley que fue dada por Jehová a Moisés y se apreciaba a los que estaban consagrados al servicio del Señor, en este caso a los levitas.
Al descuidarse de las cosas espirituales, estos servidores del templo se volvieron despreciables porque la actitud de ellos hacia el servicio se había vuelto nefasta, atendían el templo de mala gana y sin ánimo, no querían someterse a los reglamentos y actuaban como si aun estuvieran en Babilonia, totalmente ajenos al sacerdocio que se había practicado cuando Aaron servía con temor y temblor delante del Señor.
Los nuevos sacerdotes necesitaban recuperar la reverencia, el amor y la pasión por el servicio en el templo, pero lejos de eso estaban siendo violentos y prepotentes con la congregación, eran injustos y practicaban la maldad a luz de todos, tanto ellos como el pueblo descuidaron la vida espiritual y de apoco se fueron alejando de Dios por lo que las exhortaciones no se hicieron esperar porque habían tomado actitudes muy negativas en la labor que se ofrecía en el templo.
¿Cuáles son las actitudes que desagradas a Dios?
1. Hablar palabras violentas que desagradan a Dios. (v13)
- Que es la actitud: 1. Manera de estar alguien dispuesto a comportarse u obrar. 2 Postura del cuerpo que revela un estado de ánimo.
- Que es violencia: Que usa la violencia o es propenso a fomentar conflictos.
- La mala actitud de los sacerdotes frente al servicio en el templo causaba conflictos y mal testimonio entre ellos y el pueblo.
2. La falta de reverencia en el templo. (v14-15)
- Los mismos sacerdotes se habían vuelto irreverentes en la casa del Señor, actuaban en el templo como si estaban en un lugar cualquiera, en un club social o en una reunión de perversos.
- Que es reverencia: 1. Inclinación hacia adelante de la parte superior del cuerpo que se hace en señal de respeto. 2. Respeto o admiración que siente una persona hacia alguien o algo.
- De modo que los sacerdotes fomentaban los pleitos y las divisiones aun dentro de la casa de Jehová.
- Los sacerdotes decían que era por demás servir a Dios.
- Decían que No provecho en guardar la ley.
- Además, decían que no aprovechaba el ayuno.
- También decían que eran benditos los soberbios.
- Decían que los perversos prosperaban.
- Por último, decían que los soberbios tentaron a Jehová y escaparon.
3. Esta escrito el Libro de memoria para los que temen a Jehová. (v16)
- Por tal razón hoy la escritura nos aconseja que fomentemos el temor a Jehová.
- Que tengamos reverencia en la casa que a sido consagrada para la predicación de la palabra.
- Dios escucha a los que piensan en su nombre para honrarle.
- Dios ve con agrado a los que hablan a su compañero sobre las maravillas de Jehová.
4. Especial tesoro es aquel que sirve a Jehová. (v17-18)
- Los que temen a Jehová serán apartados en el día que Dios actúe contra los soberbios.
- Los que temen a Jehová serán les serán perdonados sus pecados.
- Ese día verán claramente la diferencia entre el justo y el malo, los que hoy no disciernen entre el justo y el injusto, lo entenderán en el día en que Dios actúe, y para los no arrepentidos será demasiado tarde.
Conclusion:
Dios nos invita a no menospreciar el servicio a Jehová, servir a Dios es un alto honor, mayor que cualquier cargo terrenal y la recompensa es mayor que un salario mensual, la vida eterna será la mayor ganancia para todo aquel que sirve con agrado en el templo del Señor. Demás es servir a Dios sin arrepentimiento, sin fe y sin amor. Así que todo aquel que sirve a Dios sebe de hacerlo cuidando su vida moral y espiritual.