Tema: Cuatro razones por las que Jesús tenía compasión.
Jesús no se detenía por ningún motivo, siempre estaba orando y anunciando el reino de los cielos, haciendo milagros señales y prodigios para salvar a un pueblo al borde de la destrucción.
Jesús no se detenía por ningún motivo, siempre estaba orando y anunciando el reino de los cielos, haciendo milagros señales y prodigios para salvar a un pueblo al borde de la destrucción.
Hasta aquí Jesús hablo sobre el principio de dolores con guerras, pestes, hambres, falsos profetas, falsos maestros y terremotos, sin duda el principio de dolores ha traído luto, tristeza y mucho dolor al mundo.
El tema de la resurrección era algún nuevo para los israelitas y los prosélitos, el estruendo en el aposento alto y la aparición de lenguas repartidas atrajo la atención de mucha gente y fue la oportunidad para presentar a los oyentes el plan de salvación.
A la tripulación le había parecido incómodo invernar en Buenos Puertos, y se vieron con el deseo de llegar a Fenice para invernar allí, pero el tiempo se ponía peligroso para la navegación como lo advirtió el apóstol.
Como parte del llamado macedonio los apóstoles tenían que pasar por la capital de Macedonia, y en Tesalónica Pablo tuvo que batallar, viniendo de sufrir cárcel y azotes en Filipo.
Los apóstoles habían regresado a Jerusalén, las ciudades de Samaria habían escuchado el mensaje de Jesucristo y muchos de los que habían creído fueron bautizados en agua y llenos del Espíritu Santo.
Todo discípulo de Cristo tiene un segundo paso importante que dar en el evangelio, el primer paso a sido recibir a Jesús en su corazón como Señor y Salvador.
El ministerio de Felipe se desarrolló principalmente en Samaria, después de la dispersión en Jerusalén este diácono llegó a Samaria para anunciar las buenas nuevas de salvación en Cristo.
Saulo se había encargado de infundir temor en los cristianos, después de la muerte de Esteban el diácono, se inició una persecución por la cual muchos creyentes fueron obligados a abandonar Jerusalén.
Los primeros cristianos voluntariamente aprendieron a vivir bajo la voluntad de Dios, los apóstoles eran los encargados de predicar la palabra y dirigir la iglesia según el Espíritu Santo,