Texto: Malaquías 2:1-9
1 Ahora, pues, oh sacerdotes, para vosotros es este mandamiento. 2 Si no oyereis, y si no decidís de corazón dar gloria a mi nombre, ha dicho Jehová de los ejércitos, enviaré maldición sobre vosotros, y maldeciré vuestras bendiciones; y aun las he maldecido, porque no os habéis decidido de corazón. 3 He aquí, yo os dañaré la sementera, y os echaré al rostro el estiércol, el estiércol de vuestros animales sacrificados, y seréis arrojados juntamente con él. 4 Y sabréis que yo os envié este mandamiento, para que fuese mi pacto con Leví, ha dicho Jehová de los ejércitos. 5 Mi pacto con él fue de vida y de paz, las cuales cosas yo le di para que me temiera; y tuvo temor de mí, y delante de mi nombre estuvo humillado. 6 La ley de verdad estuvo en su boca, e iniquidad no fue hallada en sus labios; en paz y en justicia anduvo conmigo, y a muchos hizo apartar de la iniquidad. 7 Porque los labios del sacerdote han de guardar la sabiduría, y de su boca el pueblo buscará la ley; porque mensajero es de Jehová de los ejércitos. 8 Mas vosotros os habéis apartado del camino; habéis hecho tropezar a muchos en la ley; habéis corrompido el pacto de Leví, dice Jehová de los ejércitos. 9 Por tanto, yo también os he hecho viles y bajos ante todo el pueblo, así como vosotros no habéis guardado mis caminos, y en la ley hacéis acepción de personas.
Introducción:
Los israelitas habían regresado de la cautividad a Jerusalén y habían empezado a servir en el templo sin entender la seriedad del servicio reverente que Jehová esperaba de los sacerdotes y de la congregación del pueblo de Israel. Parecía que la única condición que estaban cumpliendo para servir en el templo era su linaje levítico.
Los levitas necesitaban volver a capacitarse para servir al Señor de la mejor forma, apegados a las escrituras, pero no habían tomado con seriedad el servicio y estaban incumpliendo las reglas, no porque no las conocían, sino porque no les interesaba hacerlo bien, a ellos les parecía poca cosa servir en el templo de Jehová.
Como en toda empresa había condiciones para servir al Señor, no bastaba ser descendiente de Levi, había que cumplir una serie de requisitos, algunos de ellos son que el sacerdote tenía que ser sano, tenia que ser santo, tenia que casarse con una mujer virgen, tenía que ser libre de defectos físicos, etc. (levítico 21)
¿Cuáles son las condiciones para servir a Jehová?
1. Dar gloria a su nombre. (v1-2)
- Los israelitas estaban habituados a dar gloria a los dioses caldeos y persas. Entre ellos a Marduk y a Nabu dioses principales de Babilonia. el templo de Marduk se llamaba Esagila (que significa Casa de la sublime morada) donde los reyes caldeos servían fielmente a este ídolo.
- Los israelitas dieron gloria a la estatua de Nabucodonosor y no se habían arrepentido de haber honrado a una imagen.
- Gloria significa ‘fama’, ‘honor’, esplendor’ y ‘buena reputación’.
- Los israelitas debían de olvidar y arrancar de sus corazones la adoración que se les ofrecía a los dioses falsos de babilonia.
- Dios exigía a los israelitas que servían en el templo que dieran gloria a su nombre, porque su nombre es esplendoroso.
2. Servir de corazón. (v2-4)
- Los sacerdotes servían con hipocresía por eso las bendiciones fueron maldecidas por Dios.
- Jehová prometió dañar la sementera de los sacerdotes.
- Jehová prometió echar el estiércol en la cara de los sacerdotes.
- Jehová prometió arrojar a los sacerdotes como se arroja el estiércol.
- Servir de todo corazón es procurar hacer bien las cosas, como para agradar a Dios y no a los hombres.
3. Caminar conforme al pacto de Dios. (v5)
- El pacto con Leví es solo una referencia al pacto de la ley que Dios hizo con Moisés y los israelitas. Dos cosas son necesarias para caminar en el pacto de Dios.
- Temer a Jehová. Temor- Miedo que se siente al considerar que algo perjudicial o negativo ocurra o haya ocurrido. Los cristianos exhiben falta de temor cuando: Usan continuamente el nombre de Dios en vano. pecan deliberadamente, esperando que Dios los perdonen. Consideran que la adoración, la oración, los diezmo son cosas optativas para el cristiano. Consideran que el estudio de la palabra de Dios y el compromiso con la iglesia son solo para algunos momentos que se requieran. Se acercan a Dios en la adoración con una actitud irrespetuosa. No se ajustan al plan ni al propósito. (Proverbios 1:7)
- Estar humillado delante de Jehová. En la Biblia, humillarse significa aceptar o reconocer mi condición de lo que soy, como estoy y he hecho con respecto a lo que Dios dice que debería ser, estar y hacer. … Es despojarse del yo, dejar el orgullo, la egolatría, la vanagloria y sujetarse al Dios Altísimo, obedeciendo el mandamiento establecido en su Palabra.
4. Hablar la verdad conforme a la palabra. (v6-9)
- Lastimosamente los sacerdotes se apartaron del camino
- Los sacerdotes habían hecho tropezar a muchos en la ley.
- Los sacerdotes corrompieron el pacto de Levi.
- Los sacerdotes hacían acepción de personas.
- Los sacerdotes ya no tenían buena reputación delante del pueblo.
5. ¿Cuáles son las condiciones para servir en la iglesia?
- Así como había condiciones para servir al Señor en el templo de Jehová ahora también hay condiciones para servir en la iglesia del Señor.
- Estar arrepentido.
- Haberse bautizado en agua.
- Caminar en el nuevo pacto de Cristo.
- Tener temor al Señor.
- Vivir humillado delante del Señor.
- Capacitarse en la palabra para servir en una o varias áreas de la iglesia.
- Tener un llamado divino para servir en el ministerio.
Conclusión:
servir al Señor es el mayor privilegio, y es un alto honor, pero también es una responsabilidad que demanda obediencia a la palabra del Señor, demanda preparación continua para permanecer en los lineamientos bíblicos y así dar siempre la honra y la gloria a nuestro Señor Jesucristo que nos salvo de la condenación.